Los progresos en el área del reconocimiento facial han dado lugar a formas nuevas y apasionantes de interactuar con los ordenadores que ya se están integrando en distintas aplicaciones cotidianas. Esta tecnología resulta especialmente prometedora en los ámbitos de la salud, la seguridad, la educación y el entretenimiento.
Los gestos faciales han servido desde el principio de la evolución humana para expresar emociones y transmitir mensajes, incluso antes de contar con la capacidad para hablar. De hecho la cara cumple una función fundamental en la comunicación y, por tanto, es normal que el procesamiento de imágenes faciales sea igualmente importante en el ámbito de la tecnología punta.
El proyecto financiado con fondos europeos MMFP (Multimodal face processing), coordinado por la Universidad Técnica de Estambul (Turquía), ha logrado importantes progresos en este ámbito. «Nos hemos centrado en aplicaciones como la ludificación, el aprendizaje potenciado por la tecnología, los sistemas de asistencia, la clasificación de archivos audiovisuales y la animación», afirma el Dr. Hazim Kemal Ekenel, profesor asociado del Departamento de Ingeniería Informática de dicha universidad e investigador del proyecto.
En este sentido, el equipo del proyecto creó un marco común con el que extraer información de imágenes de rostros y amplió al máximo la capacidad de extracción de información. También logró progresos importantes a la hora de establecer una base para el procesamiento de rostros en condiciones ambientales. Un paso importante en este sentido fue el aprovechamiento de las redes neuronales convolucionales (CNN), redes neuronales artificiales inspiradas en procesos biológicos que se han utilizado hasta ahora con éxito para analizar imágenes.
Fuente: Cordis